LA COFRADIA DEL RESPIGO
REALIZO SU PRIMER CAPITULO GENERAL
Asistieron cofradías gastronómicas de cinco regiones españolas.
La Cofradía del Respigo de Laredo celebró el pasado sábado su Primer
Capítulo General, acto en el que se vio acompañado de otras varias
cofradías y en el que hizo entrega de la distinción de cofrade de honor
al consejero de Cultura Turismo y Deporte del Gobierno de Cantabria,
Javier López Marcano, al alcalde laredano, Santos Fernández, y la
restauradora local, Dionisia San Martín López.
Los diferentes cofrades fueron recibidos en la sede del colectivo sita
en la calle San Francisco (antiguo Drink Club) donde se les sirvió un
almuerzo. A las 11,30 horas, y pese al lluvioso día, se realizó una
concentración de Cofradías y peñas musicales junto a la Plaza de la
Constitución, seguido por un breve paseo por la Puebla Vieja y de un
pasacalles hasta la Casa de Cultura. En este lugar, en su salón de
actos, se celebró el acto central del Primer Capítulo, en el que se
nombraron seis nuevos cofrades de número y se concedieron las
distinciones mencionadas a los nuevos 'Cofrades de Honor'.
Luego, en el interior del 'Túnel', los asistentes dieron cuenta de un
suculento menú compuesto por empanada de respigos; anchoas de Laredo con
pimientos de Isla; guiso de patatitas con merluza y almejas; lechazo al
horno; rueda de quesos y postre cántabros, y degustación del licor del
peregrino.
Al acto acudieron un total de once cofradías gastronómicas y vínicas
procedentes de Cantabria, Asturias, país Vasco, Castilla león y
Comunidad Valenciana, que valoraron como muy positiva y agradable la
jornada de confraternización vivida en Laredo. Concretamente las
cofradías asistentes fueron las cofradías de: la morcilla de Burgos, de
la anchoa del cantábrico de Santoña, del queso de Cantabria, del Zapico,
Doña Gontrodo de Asturias, del Vino de Rioja, amigos de los quesos de
Asturias, amigos de los nabos de Asturias, del hojaldre de Torrelavega y
del vino de Cangas, de Asturias, así como el Circulo de enófilos Utiel-Requena.
igualmente asistió a este Capítulo de la popular cofradía laredana y el
Presidente de la Federación española de cofradías gastronómicas y
vínicas Carlos Martín Cosme.
BREVE RESEÑA DE LA
COFRADIA DEL RESPIGO
La Cofradía del Respigo de Laredo se creó en 2002 por parte de un grupo
de personas -un núcleo de amigos en su orígen- que se declaraban
entusiastas de este producto huertano, que -denostado durante las
últimas décadas- había prácticametne desaparecido de la dieta de los
laredanos en los últimos años, pero cuyo consumo había permanecido vivo
en los hogares de hábitos culinarios más tradicionales. Este animoso
grupo, apadrinado por el popular personaje laredano "Antuan", auténtico
adalid de esta verdura durante años en su negocio hostelero de la Puebla
Vieja, ha conseguido en estos 6 años resucitar en la mente y los hogares
pejinos a tan maltratado producto. En la actualidad son más de 25 los
"cofrades" que participan de la Asociación, entre ellos hosteleros,
comerciantes, empleados y varios concejales del propio Ayuntamiento.
Desde su fundación la cofradía ha participado en cuantos encuentros
gastronómicos tiene lugar en la región, así como en las diversas
manifestaciones culturales y festivas de Laredo se les reclama (feria
del Queso, jornadas gastronómicas, etc...). Desde 2005 la cofradía
organiza el "Día mundial del Respigo" en el que se ofrece una
degustación gratuita del "manjar" a cientos de personas que se suman al
festejo, auspiciado por el Ayuntamiento laredano.
El respigo es el brote y la hoja tierna del nabo, (grelos les dicen en
Galicia) que se recoge en el momento álgido del invierno, antes de que
florezca, para ser cocido y, una vez escurrido, ser "acabado" rehogado
con aceite y ajos y "sacramentado" al gusto del consumidor: con chorizo
o tocino, con gulas y/o gambas, en "tortos" con rebozo de huevo y
harina, en empanada, en tortilla... Las posibilidades culinarias de este
producto, como plato principal o como guarnición son inmensas. Su sabor
particular -ligeramente amargo y fibroso- le diferencian claramente de
otras "hojas" de aspecto similar (acelgas...) haciendo del respigo un
alimento singular y muy enraizado en la tradición alimenticia (ahora
diríamos gastronómica) pejina.