Tolosa se vistió de color
con el XVIII Gran capítulo de la Cofradía de la Alubia
A partir de las 10:00 de la mañana se iban
concentando las cofradías que asistieron al Gran Capítulo de
los amigos de la Alubia de Tolosa
y a las 11:30 comenzaba el desfile por la parte vieja de la ciudad para
llegar al Ayuntamiento donde se celebraron los Actos.
A las 12:00 en punto, el Gran Maestre, Jose
Ignacio Tellería, abría el solemne acto en el Salón principal del
Ayuntamiento de Tolosa rodeado de una mesa de Síndicos, Grandes Maestres y
Presidentes de otras cofradías venidas de toda España y Francia para
acompañar al Acto, entre los que se encontraba el Presidente de FECOES,
Carlos Martín Cosme. Tras la introducción se fueron invistiendo los nuevos
cofrades de honor y de mérito, en una sala abarrotada de
asistentes que no se quisieron perder la cita. FECOES estuvo representada
por su Presidente Carlos Martín Cosme.
Y en el medio del Salón, la figura
principal: La Alubia. Un puchero guardaba en su interior las mundialmente
conocidas Alubias de Tolosa, ante el cuál todos los cofrades investidos,
con las manos encima del puchero, se comprometían a defenderlas allá por
donde fueren.
Entre los cofrades de honor que se han investido
este año figuraba un ilustre cocinero y Luis Chillida, el hijo de el
mundialmente conocido escultor vasco que ha llenado con su obra muchos
paisajes de todos los rincones imaginables.
El momento más emotivo llegó cuando el Gran
Maestre Jose Ignacio Tellería hacía el relevo del bastón de mando,
después de dieciocho años al frente de esta cofradía y se lo entregó al
nuevo Gran Maestre Jos Miguel Gómez Elósegui, quien continuará
desarrollando esa labor de promoción de la alubia de Tolosa.
El apoyo de la Corporación Local al acto,
con su Alcalde al frente, reforzó a los asistentes la importancia que
tiene esta Cofradía y el producto que defienden por todos los rincones,
para que nunca se pierda una tradición tolosana con el paso del tiempo.
Después, una visita y aperitivo en las
diferentes sociedades de la villa para coronar con un ágape en el
Restaurante El Frontón, cuyo plato estrella era la Alubia de Tolosa, muy
bien cocinada y coronada por los sacramentos, o tropezones que se le
vierten para hacer el delirio de un plato que aunque humilde, es un manjar
entre las comidas tradicionales.