X Capítulo de la Cofradía del arròs i la taronja de Castellón

19 de junio de 2004

   

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A las 19:00 horas reunión de cofradías en la plaza del Ayuntamiento de Castellón y a las 19:30 comenzó la procesión hacia el Museo de Bellas Artes, donde se realizó el X Capítulo que fue presidido por D. Vicente Farnós, D. Jose Luis Alé, D. Gonzalo Nuín y D. Jesús Llona.

El presidente (Jose Luís Alé) inauguró el acto y Albert, secretario de la Cofradía, comenzó el mismo y dio un recital sobre la gastronomía mediterránea. Después, las correspondientes investiduras de cofrades de Honor que este año recayeron, entre otros, en la actriz valenciana Amparo Climent que cerró la investidura con un discurso de amistad a todos los comparecientes y prometió, junto con el resto de investidos, defender la gastronomía mediterránea, entre cuyos productos se encuentra el arroz y la naranja.

Tras un vino de honor en el claustro del Museo, se congregó a los asistentes a una cena en el Restaurante Racó del Port, cuya sinfonía de placeres gastronómicos regados con vinos de Castellón, Valencia y Alicante, dejará recuerdo a todos los comensales y auguramos una larga vida a esta cofradía defensora de esa gastronomía de primer nivel, que nunca debe perderse.

Vino de honor tras el Capítulo

El Presidente de la Cofradía del arròs i la taronja, D. José Luis Alé Reves, reunido con la actriz Amparo Climent (que fúe investida cofrade de honor), los presidentes del Círculo de Enófilos Utiel-Requena de Valencia (Carlos Martín Cosme) y del Raim (Jose Luis Orts) de Alicante, y el amigo Emiliano que no faltó al acto.

Jose Luis Alé con los amigos vascos de la cofradía del queso de Idiazabal.

El presidente hablando con la cofradía portuguesa invitada al acto.

Angel, se felicita por el buen desarrollo del X aniversario y brinda por otros diez años más.

Luis Toca levanta la copa de alegría por la Cofradía y los amigos que asistieron al Capítulo con un brindis de honor.

Uno de los platos esquisitos que se sirvieron en la cena fue el postre: sopa de navelate amb gelat de pebre, que sin duda alguna, culminó la sinfonía de placeres gastronómicos que se degustaron en el conocido Restaurante Racó del Port, gentileza de la Cofradía y del restaurador Lino.